El plástico está de una u otra forma presente en cada aspecto de nuestra vida diaria y es un material que ha resultado muy útil en la historia de la humanidad. El plástico es un material durable y resistente que ha traído mejoras, especialmente en la higiene de alimentos e insumos médicos.
Pero es también la durabilidad de este material lo que ha provocado un problema enorme del que apenas estamos tomando consciencia. La contaminación por plástico.
Cada año se producen en el mundo 8 millones de toneladas de basura que llegan a mares y océanos. Para dimensionar lo que significa esta cantidad de basura, es equivalente al peso de 800 Torres Eiffel, podría cubrir 334 veces la isla de Manhattan y pesa lo mismo que 14285 aviones Airbus A380.
Cada segundo llega al mar 200 kilos de basura, esto es una barbaridad, la mayoría son plásticos de un solo uso. El mar es tan grande que se desconoce exactamente cuanto plástico hay en él.
La basura que vemos en la superficie de los océanos es solo el 15% de toda la que existe, de hecho, el 70% se va al fondo marino. Esto representa un gravísimo problema ambiental mundial, más porque para este año la producción de plásticos aumentó en un 900% con respecto a 1980.
Los fragmentos más pequeños de plástico vuelven a los seres humanos a través de la cadena alimenticia. Los peces comen el plástico y posteriormente nosotros lo hacemos al comer el pescado.
Dices ¡No es verdad! Si hubiera un plástico dentro de mi pescado lo sabría, y en algunos casos sí, pero la mayoría de los fragmentos son microscópicos, por lo que hay una buena posibilidad de que hayas comido un poco de plástico en ese robalo fresco.
A pesar del problema tan grande que representa la contaminación por plásticos, ha habido bastante resistencia para descontinuar su uso y las medidas para disminuirlo son bastante recientes, pero esa es la tendencia ya que este ritmo de contaminación es insostenible en los próximos años.
Todo esto ha aumentado la demanda por envases biodegradables y compostables y estos se presentan como una interesante alternativa a los plásticos derivados del petróleo, ya que son fabricados con insumos como fibras vegetales y derivados del almidón de algunos vegetales.
El camino aún es largo, porque además del reto que representa lograr que la población mundial acepte el uso de estos materiales, también es importante desarrollar instalaciones para su manejo posterior y es que la mayoría de los “plásticos” compostables solo lo son si se procesan industrialmente y no si, digamos, enterramos los platos de la parrillada en el jardín.
Pero la acción más importante que podemos tomar es hacernos conscientes del problema.
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